Tiempo
12:30 | Author: Pabs
Ya van siendo varios años
De una huida, de un engaño
Y mientras pasan los momentos
La vida se viene siempre al suelo.

Deseo juntar esos extremos,
Y poner en mi cuello un talismán de fuego
Juntando mis manos y rezando al viento
Que todo el daño se consuma en el tiempo.

Veo atrás y veo desprecio,
Veo el futuro y se encuentra incierto,
Veo el presente y no sé si siento
Pero es ahora cuando estoy viviendo.

Y todavía, aún recuerdo
Los estigmas que en mis huesos dejo el hielo
Que con locura de besos y aliento
Trate de borrar sin remordimiento.

Entre más lo pienso, más lo creo
Que todo va a desencadenar un milagro,
A pesar de mi credo
Para poder naufragar sin miedo,
Oyendo el rumor del cielo
Que ya gris se ha puesto,
Y que sólo los rayos iluminan de nuevo.

Es tiempo lo que quiero,
Revertirlo y rehacerlo
Según mis movimientos,
Sean firmes o siniestros
O tal vez débiles y contentos.

Es tiempo lo que hace falta
Para acabar con las falsas amenazas,
De una vida perfecta,
Que se desvanece en la nada.

Es el eclipse el que predice,
Que después de varios años
Todo desaparece cuando la muerte llega
Sin poder divisar donde dejaste tus huellas.
Decirte adiós!!!
21:35 | Author: Pabs
Cuando dices, que fui un timador de emociones
En realidad, eso no me conmociona,
Puedes decir que fui calculador,
Pero no por eso voy a tratar de hacerte sentir mejor.


Y es verdad, pude haber sido ser mejor,
Y es verdad, tal vez fui cruel,
Pero yo sé que fuiste más infeliz al quedarte sin mí,
Yo sé, te lo juro
Que estarás tres veces más triste sin mí.


Así que me puedes decir ¿cómo es qué medías ese “amor”?
Si todas esas charlas agridulces, salían de tu boca.
Y al yo tener que saborear esas palabras,
Se me dificultará el tragar,
Pues eso fue lo verdaderamente dulce,
El saber que me volví inmune
A tu manipulación y a tus juegos.


Pero ya no se puede volver al inicio,
Porque nuestro tiempo ya murió.
Y adoro, y amo, el verte sufrir sin mi amor,
Y te juro que nunca más volverás a tenerme atado.

Pudiste comprarme, quebrarme,
Besarme y hasta mantenerme,
Aunque luego de haberlo intentado,
Me perdiste para siempre.
Porque después de todo fue inevitable que me deshiciera de ti.

Aún sabiendo que me necesitabas
El doble de lo que yo a ti.

Y ahora sé,
Que dejaste de vivir, cuando me fui,
Y ahora sé,
Que puedo reír por ese fin.

PD: Esto fue algo que debí haber escrito hace mucho tiempo (no es nada elevado, ni mucho menos algo muy elaborado, es solamente una despedida sencilla). Con esto pongo al fin de esas "Ruinas de Herejía" que durante ya bastante tiempo, he tratado descifrar. Ahora es momento de recapacitar y demostrar que todo aquello que nos hizo daño, estorbo, o no ayudo en nada; ahora me da igual.
De mis deseos y sentidos
0:49 | Author: Pabs
Los dados están lanzados,
La suerte es sólo pasado,
Los pensamientos siguen siendo abstractos,
Pero las decisiones son firmes al tacto.

La benevolencia se ha acabado,
Y los humos se me han impregnado,
Los perros deambulan a mi lado,
Mientras te veo apretar fuertemente tus párpados.

Mientras el sol cae,
Me vuelvo más ignorante,
Mi ambición no ha dado resultado,
Pero mi decisión si que ha cambiado.

Cambio constante ha de hacerse,
Para no aburrirme, ni aburrir a la gente,
Para no depender de nadie,
En este tiempo en el cual estamos sedientos.

El espacio exterior se ha desintegrado,
Las riquezas de los reinos se han agotado,
El temor se ha ido propagando,
Desde tu interior hasta mis brazos.

Los corazones se construyen con andamios,
Así como en las catedrales de antaño,
Se forman nuevas figuras danzantes
Cuando el sol se sitúa en lo alto del valle iluminando,
Los coloridos vitrales de los arcos ojivales.

Las doncellas cantan y bailan,
Agitando sus ligeros trajes,
Recordando así imágenes
De las esperanzas y sus viajes.

Mientras a mi costado va resbalando el agua,
De la cascada solitaria,
Que brota de mis ojos,
Y me hace descansar de mis suspiros,
De mis deseos y sentidos.
Ámbar (Parte I Remake)
18:56 | Author: Pabs
Me posé sobre ella acariciándola con el dorso de mis manos, de una forma casi más amorosa, que apasionada. Fui recorriendo su cuerpo, sentí su cabello negro y largo entre mis dedos, sentí su cara suave y tersa, seguí con su cuello hasta llegar a sus senos, ahí me detuve un breve momento mientras la oía gozar de la experiencia. Iba a seguir bajando cuando me poseyeron unas ganas inmensas de saborear su piel además de sentirla.
Decidí que comenzaría con sus manos, pero justo en el momento en que pose su dedo índice en mis labios sentí un sabor a óxido o mejor dicho a hierro.
Entonces le preste más atención a sus manos y en ese momento la vi.-Se oyó el ruido de un teléfono al sonar.
-¿Aló, habló con el señor Aaron Montblanc?- habló una agitada voz femenina al otro lado de la línea, del teléfono que recién había sonado.
-¿Si, con él habla quién es?- pregunté sobresaltado.
-Disculpe que lo interrumpa a esta hora –voltee a mirar lentamente hacia la mesa de noche, mientras me restregaba el ojo izquierdo con la mano que tenía desocupada, y noté en el reloj que eran las 3:19 a.m-, mi nombre es Lucía de León.
-¿Qué se le ofrece, que sea tan urgente para que llame a esta hora? –dije un poco irritado.
-Le pido me disculpe nuevamente señor Montblanc, en estos momentos estoy tratando de salvar mi vida, ocupo verlo lo antes posible –Me dijo con una voz nerviosa y entrecortada-. Más bien creo que sería mejor mañana, ¿conoce la vieja Mansión Nemophila?
-¿Es la que está llegando casi al bosque de Frost River?-le cuestioné, ya un poco más despierto y nervioso.
-Si esa misma, lo espero mañana a las 10:00 p.m. por favor le suplicó que llegue es de vida o muerte para mí -Me suplicó-. Si no me cree vaya a la jefatura de policía de Frost River mañana y diga que está ahí por orden mía y que ocupa mi oficina, cuando nadie lo vea introduzca la siguiente clave “1-9-8-7” en la caja fuerte que está bajo mi escritorio y lea lo que hay ahí dentro –me dijo apresurada-. Lo tengo que dejar no puedo hablar más. Cuídese mucho y fíjese bien a su alrededor, nos vemos mañana por la noche.- y soltó el teléfono.
-¿Señorita?, ¿Lucía?- dije con la voz temblando, y traté de oír lo que pasaba del otro lado pero ya se había cortado la llamada.
Colgué el teléfono con el corazón latiendo muy rápido, y voltee a ver la hora eran las 3:23 a.m. por lo que la llamada duró apenas cuatro minutos. Cuatro minutos que me dejaron totalmente confundido y nervioso.
Intenté volverme a dormir pero el miedo de tener ese sueño tan extraño y excitante; más lo alarmante del final de esa llamada “fíjese bien a su alrededor” no me ayudaba para poder descansar. Entonces me levanté lentamente y vi que ya eran casi las 4:00 a.m. una hora antes de mi hora normal de amanecer y me encaminé al baño para ducharme, y alistarme para la reunión con mi editor.
Salí del baño con el pelo húmedo todavía y el cepillo de dientes en la boca, mientras iba dejando un camino de agua por donde iba pasando. Me asomé por la ventana como solía hacer todas las mañanas antes de ir a trabajar, cuando de repente oí un estruendo a la par mía.
No olvido
14:10 | Author: Pabs
Hoy se me olvido decirte que la música suena triste,
Cuando pienso en lo que me diste
Y en como mi vida se quema cuando intento perseguir tus huellas.

Hoy se me olvido contarte lo mucho que desee abrazarte,
Como en aquella lejana tarde,
En la que unidos por el aire reímos sin pensar en nadie.

Pero,
¿Quién puede decir lo que las rosas piensan?
Si por vos puedo romper estrellas,
Y conjurar cometas para que te acerques de nuevo a mi planeta.

¿Qué pensarán las rosas al oírme nombrarte?
¿O cuando veo en el cielo brillante,
Tu rostro lleno de amor?

Y es que aunque navego por mil mares,
No he logrado recuperar lo que tenía.
Por que ni Dios, ni la melancolía
Pueden devolverte a mi vida.

A pesar que las lágrimas humedecen mi almohada,
Ya que negar lo sucedido no me hace lograr,
Que acepte el destino.

Por que aunque no lo creas aquí alguien te ama,
Y aunque lo hayas dudado estarás siempre a mi lado,
Por que te recuerdo entre mis brazos,
Y recuerdo sentir como tus labios reían,
Con esa risa que dejó de ser mía.

Quiero que sepas que lo que no olvido,
Son tus manos, tus consejos y tus llantos.
Por que fui bendecido con un ángel
Que tuvo que regresar al cielo.

Fui bendecido por la amistad más bella,
Que hoy genera el llanto de las estrellas,
Generando nuevas perlas,
Que hoy también me hacen llorar.

Hoy ya entiendo lo que las rosas decían,
Y hoy ya entiendo lo que mi corazón sentía,
Después de todo este tiempo no sé si logré valorar lo que tenía,
Sólo sé que hoy sufro por el momento en que abandonaste mi vida.
Remake Ámbar y otras cosas!
23:46 | Author: Pabs
No he podido en estos días agregar nada más sobre la historia de Ámbar, ni alguna cosa nueva en mi blog.
Estoy trabajando lenta y fuertemente en el "remake" de lo que hasta ahora viene siendo Ámbar.
La pregunta es ¿por qué?, la razón es muy sencilla, dado la aceptación que esta historia ha tenido, decidí tomarme más en serio (más "profesionalmente") esta creación.
Con el fin de poder empezar a hacer una historia formal que se basa en Ámbar y bastante de lo que han podido leer.
Además como proyecto próximo desde hace ya bastante años en mi mente se viene formando una historia, ésta vez con un personaje masculino como principal que se llama "Ellian", todavía no está escrita pero espero después del "remake" de Ámbar poder empezar a darle vida a esta nueva historia.
Muchas gracias por su apoyo hasta el momento.
Atte:
Pabs
Ámbar ( III Parte)
21:23 | Author: Pabs
Volvió a su lugar preferido de la mansión y volvió a recordar lo ocurrido, no podía olvidar su satisfacción y la sensación que le produjo verlo ahí cara a cara y saber que estaba a punto de ganar lo que siempre había deseado.
Intentó ver la escena desde afuera, como si su alma se hubiera dividido en ese preciso momento en dos y pudiera ver su propia cara endemoniada mientras desnuda y bañada en sangre decía: "Me llamo Ámbar".
Podía sentir esa adrenalina, esa emoción y esa satisfacción infernales. Esas sensaciones que sólo una gran acción puede generar.
De repente se oyó un fuerte ruido en el patio donde lo había enterrado, era un ruido pesado, como si alguien tratará de caminar sin hacer mucho ruido, pero a la vez como si quisiera ser escuchado.
El escalofrío que Ámbar sintió al escuchar esos pasos fue lo peor que pudo sentir. Se quedó petrificada y no por el miedo que además sentía. Si no porque el lugar había cambiado su temperatura, se estaba poniendo más y más frio, como si una nevada de las que Ámbar solía huir, estuviera estrechándole la mano.
A pesar de eso, sabía lo que tenía que hacer. Sacó de su cuello un rosario, pero no uno normal al que usaban los monjes de la abadía que estaba bajando la colina de la mansión. Ese rosario era diferente, empezando por su color, era negro, un negro tan brillante y oscuro como la noche misma; además el crucifijo era distinto, semejaba una cruz, a excepción que su extremo inferior estaba cortado, lo que le daba una apariencia de "T" y estaba empedrado en esmeraldas, topacios, rubíes, zafiros y pequeñas incrustaciones de algunas otras piedras preciosas que le daban destellos de color muy sutiles.
Se lo poso sobre sus ojos y repitió unas palabras que sólo la gran ventisca que entro en ese momento pudo escuchar. Y Ámbar despertó sus ojos por segunda vez en dos días.
En ese momento sus ojos se tornaron de color rojo intenso, la misma tonalidad del rubí de su crucifijo.
Se lo coloco de nuevo en su cuello, para que volviera a colgar donde siempre estaba, entre sus senos. Y pudo moverse.
Salió lo más calladamente posible, y justo afuera de la profanada tumba lo vio. El hombre que recién había matado la noche anterior, y por el cual había llorado como nunca, desnudo en el suelo con sus brazos desgarrados, su boca abierta casi de manera inhumana, una expresión de miedo descomunal, sus piernas con grandes y profundos cortes que no dejaban ocultar los músculos que sobresalían al aire libre por encima de la piel.
Ámbar lo entendió todo en ese instante. Le habían quitado lo que ella había estado tratando de preservar. La habían derrotado su plan fracaso, la muerte de su amado resulto inútil. La habían humillado, y destrozado internamente.
Ella sabía lo que pasaba a la perfección, y la ira se apoderó de ella a tal grado que de su cuerpo empezó a emanar un aura de fuego, que producía un calor tan intenso que podía ser capaz de calcinar a un ser humano en cuestión de segundos.
No pudo más y grito- "Maldición, juro por mi sangre que voy a vengarme". Aunque sabía que ya nada podía hacer.
El alma de su amado había sido desgarrada...
Desapareciste al perderte
22:52 | Author: Pabs
¿Ahora quién será al que busques?
¿A quién miraras con ilusión?
Si antes fuimos uno,
Y hoy de nosotros ya no queda ninguno.

¿Quién hará que reencarnes esos sentimientos?
Si la brisa del océano flota desde la antigüedad,
Trasladando consigo las esperanzas,
De una nueva realidad.

Hoy, en el presente
Estamos en mundos distintos,
Tratando de evitar posibles viajes,
Que sólo inviten a navegar a nuevos desaires.

Con sabor a sal me despido,
De aquella luna del mar,
De la que ahora,
Esta historia es sólo un dato más que anexar.

Cuando he descubierto la verdad del cielo,
Me doy cuenta que no te tengo
Rezando a esa luz cegadora,
A la cual invoco tu regreso.

Así como una centella que rápidamente desaparece,
Así se esfuma la visión difusa de este vidente,
Que se pierde de repente,
Como desapareciste al perderte.
Místico Paisaje
22:28 | Author: Pabs
El círculo infinito se extiende,
Encerrándote dentro de él
Viendo como intentas huir de la noche,
Que cae como una lluvia de reproche.

La luna ha salido esta noche,
Para dibujar tu silueta en el horizonte
Allá donde los árboles se mueven como brazos,
Allá donde se encuentran tus labios.

La luz ha sido absorbida,
Por la implacable decisión de la noche
De dejar sin claridad las estancias que recorre,
Mientras las nubes lloran por verte tan lejos de mí,
En esta abadía de estrellas.

Ahora espero tu abrazo en este lago silencioso,
En el cual mis pensamientos van flotando
Como las aves de los cielos,
Y como los peces en los riachuelos.

Lo que siento es que te acercas,
Cuando deseo que te acerques,
Pero te alejas,
Cuando estoy llorando por que tú presencia permanezca.

Lo cierto es que la luna y las nubes han visto
La intensa agonía del cerezo
Que lucha día con día por renovarse de nuevo,
Que lucha amanecer tras amanecer,
Para no dejarse morir en los brazos de Morfeo.

En este lago te sigo esperando,
Viendo el reflejo de tus manos,
Oyendo el rumor del viento entre los árboles,
Y sintiendo que son tus susurros en mis oídos,
Lo que oigo mientras camino.

La oscuridad avanza rápidamente,
Como avanza el tiempo,
Como avanza el viento
Y como me gustaría que avanzaran tus caricias por mi pecho.

Por que de lo profundo de mi alma,
Salen a trote todos los recuerdos de aquellas noches,
Donde yo en éxtasis he deseado que me toques,
Ahí donde yo he deseado que me provoques.

No es inteligencia, ni mística de antaño
Es sólo cuestión de química,
La razón por la que quiero que estemos en este lago,
Tumbados sobre el húmedo suelo,
Bajo uno de esos siniestros árboles ermitaños.

Más que eso, es el deseo,
Lo que me hace viajar en cada sueño a este paisaje,
En el cual te veo,
Pero en el que a pesar de eso huyes de mis silencios
Como huye la oscuridad ante los interrumpidos destellos.
Ámbar (II Parte)
21:42 | Author: Pabs
Se vistió lentamente, sin importarle que la sangre estuviera impregnada en su piel. Recogió las sábanas manchadas, y se dirigió hasta donde estaba el cuerpo de su "amante". Lo tomó entre sus brazos y Ámbar empezó a llorar desconsoladamente.
No era la primera vez que lloraba, ni tampoco era la primera vez que mataba a alguien.
Pero esta vez era diferente, ese hombre que yacía en el piso siempre había sido su amor, el hombre que siempre deseo desde lo más profundo de su corazón.
Estuvo así un cuarto de hora entre sollozos y suspiros. Luego se levantó sostuvo el cuerpo de su amante junto al suyo y lo llevó al patio de la mansión donde vivía.
Ahí entre una fosa previamente cavada envolvió al hombre inerte con las sábanas llenas de sangre y algunos otros líquidos resultados de la pasión de la noche anterior.
Lo deposito suavemente y lo cubrió poco a poco sin querer dejar de ver lo poco de su rostro que se podía apreciar entre las sábanas. Una pala de tierra, la segunda, la tercera y así hasta que su amor quedó enterrado.
Ámbar se devolvió cabizbaja al interior de la mansión, sintiendo su alma desgarrada, y su vida sin sentido alguno.
Su único consuelo era el tener dentro suyo toda la sangre de aquel que yacía bajo la tierra. De aquel al que por fin pudo seducir hacia sus brazos. Aquel que amó, que mató, y lloró. Toda esa sangre dentro de su cuerpo excepto la poca que quedó embarrada en las sábanas.
Todos esos sentimientos y emociones quedaron muy profundo, y escondidos así como el nombre de ese hombre, que sólo ella conocía por esos alrededores.
Resignada a la pérdida se sentó entre la maleza que se abría paso entre la fría baldosa ya degradada del suelo de su estancia favorita de la mansión. Ya ella sabía que eso iba a suceder, por eso lo hizo. Era ella o él. Y entre los dos escogió que fuera él. Al menos había una remota posibilidad de que sus esperanzas no murieran del todo.
Se puso en pie y subió al piso de arriba, paso retratos de figuras tristes, habitaciones vacías, escaleras podridas por la edad, camino por el pasillo hasta entrar a una pequeña habitación situada al final de dicho pasillo a mano derecha.
Una vez dentro observó la pequeña escalera de plata que relucía y que sin duda alguna no encajaba en el ambiente lúgubre de la mansión.
Asió la escalera y subió por ella con cuidado y lentamente, una vez arriba encendió una vela, esa vela que siempre estaba ahí y que sin explicación alguna nunca se gastaba sin importar el pasar del tiempo.
La tenue luz de la flama ilumino el pequeño lugar, donde Ámbar una vez más notaba con desencanto todos los tesoros de esa habitación de plata.
Se veían rosarios de piedras preciosas, escudos de algún material tan precioso como la luz de luna, y tan fuerte como el diamante, había artefactos traslúcidos de los que no se podrían decir su funcionalidad. Pero Ámbar se dirigió hacía un pequeño cofre de color azul, hecho de zafiro reluciente a la luz amarilla, lo abrió y extrajo un trozo de papel negro.
Ahí empezó a leerlo lentamente, se lo hecho a la bolsa, sabiendo que pronto lo debería regresar y apagó la luz...
Ámbar (I Parte)
23:15 | Author: Pabs
La observé por última vez y la vi riendo.
Entre esas antiguas sábanas blancas, en ese momento no tan blancas. Mientras me volteaba a ver con una sonrisa macabra en su mirada.
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Desnuda y a la vez cubierta. Debía tener alrededor de unos 35 años, blanca, delgada, cabello oscuro y de un porte real, que en ese momento le confería un aire de princesa nocturna sobre las blancas sábanas.
Noté como sus piernas relucían sedosas al reflejar la luna de esa noche fría. Vi sus muslos y su entrepierna. Los primeros bien formados y ejercitados con el punto perfecto entre esbeltez y fuerza. Lo segundo fue lo que más me excito, un cáliz dispuesto a recibir todos mis encantos y masculinidad.
Sus pechos me seducían como seduce lo dulce a las hormigas. Veía como se mantenían firmes cuando ella hablaba, no muy grandes y no muy pequeños. Sólo del tamaño perfecto para poderlos acariciar entre mis manos.
Me le acerqué desnudándome nerviosamente poco a poco, pero sabiéndola seducir con mi físico bien esculpido, y viéndola directamente a sus ojos verdes, obligándola que a su vez ella viera mis ojos negros.
Vi como posaba su atenta mirada cuando me despoje de mi ropa más íntima, y pude notar su divertida mirada de travesura.
No lo pensé dos veces, si ella me seducía, yo iba a aceptar la seducción. Y me pose sobre ella acariciándola con el dorso de mis manos, de una forma casi más amorosa, que apasionada. Fui recorriendo su cuerpo, sentí su cabello negro y largo entre mis dedos, sentí su cara suave y tersa, seguí con su cuello hasta llegar a sus senos, ahí me detuve un breve momento mientras la oía gozar de la experiencia. Iba a seguir bajando cuando me poseyeron unas ganas inmensas de saborear su piel además de sentirla.
Decidí que comenzaría con sus manos, pero justo en el momento en que pose su dedo índice en mis labios sentí un sabor a óxido o mejor dicho a hierro. Entonces le preste más atención a sus manos y lo que descubrí casi me deja sin aliento.
Sus largas uñas estaban llenas de sangre, pero también lo estaban sus manos. Di un salto y me aparté rápidamente de ella, pero no lo suficiente para detener el beso que ella me dio en el cuello. En ese momento lo sentí, había estado tan excitado oyéndola gemir, que no note que sus uñas arañaban y rasgaban de forma delicada la piel de mi espalda. Lo extraño de la situación me lleno de un ardiente deseo renovado por tomarla ahí mismo, tal vez fuera por el fetiche de ver la sangre o sencillamente que no podía resistir esos ojos verdes.
Me acomodé y nos unimos entre gemidos de placer y suaves gritos de dolor. Ella fue mía y yo de ella en ese momento, moviéndonos como uno sólo, y notando la sangre que ahora también bajaba de mi pecho y que bajaba justo a su entrepierna, lo cual me aumentaba radicalmente el placer, viendo mi líquido vital en su zona más íntima, y pintando mi hombría de color escarlata.
Aumentamos la velocidad hasta acercarnos poco a poco al frenético orgasmo que deseábamos. Y justo en ese momento, cuando yo sentía ya dentro mío una explosión de estrellas, que me besó como una fiera en la boca. Esto me hizo sentir el éxtasis más grande que en mi vida había sentido, quede teñido por la sangre, cansado por el esfuerzo, débil por el orgasmo; y justo hasta ese momento note que también quede muerto ya que de mis heridas no brotaba más sangre, toda la tenía ella entre sus piernas, entre sus labios, sobre su cara, en sus pechos, y hasta en las sábanas blancas donde estaba muriendo.
La observé por última vez y la vi riendo.
Entre esas antiguas sábanas blancas, en ese momento no tan blancas. Mientras me volteaba a ver con una sonrisa macabra en su mirada.
Justo en ese momento me dijo me llamo Ámbar ...
El resto no lo pude oír sólo cerré por última vez mis ojos, y me trasladé a quien sabe que otra dimensión lejana.
Locura!!!
16:17 | Author: Pabs
Es vital en este mundo de tanto diario ajetreo, hacer un alto y ponerse a pensar en lo que ha sucedido, lo que hacemos, y lo que vayamos a hacer.
En estos tiempos el peor enemigo de uno, no es otro que uno mismo. Por eso debemos conocer nuestra propia locura, límites, capacidades, debilidades y demás cosas que sólo se pueden explorar adentrándose en uno mismo, a su misma vez exponiéndose ante la vida; buscando retos nuevos y que día con día se logre transformar los sentimientos compartidos durante algún lapso, en algo menos efímero que un recuerdo y menos longevo que un tatuaje.
Por esta razón expreso mi locura, de forma escrita, de forma oral, de forma musical, de forma gráfica, de forma digital. Lo que en realidad importa es no quedarse dentro de ese muro de cristal tan frágil pero a la vez tan fuerte. Dentro de esa irrealidad propensa a resquebrajarse en cualquier momento.
De ahí que todo lo habido y por haber se puede transformar en algo menos perecedero, para guardar así aquellas cosas que nos gustan, nos disgustan, aquellas cosas que hemos amado, y las que también hemos odiado.
Por eso cada artista, cada genio, cada gran pensador; lleva un aún más grande loco en su interior!!!
Debido a esto expreso humildemente mi locura, para conocerme a mi mismo y guardar aquellos momentos que me han hecho ser quien soy.
Por esa misma locura soy Pabs, hijo de Saturno, hijo del tiempo.